Ya llego!! El recién nacido hasta los tres meses

Características del dormir en esta etapa.

El bebe intraútero posee un sueño fetal, con ciclos de sueño y vigilia cada dos horas. Se halla en un ambiente estable con respecto a la temperatura, los sonidos y, fundamentalmente, permanece en un ámbito sin estímulos luminosos.

Al nacer, su reloj biológico deberá acomodarse lentamente al ritmo diario  de veinticuatro horas. Este pasaje del ritmo biológico intraútero al ritmo biológico diario, es posible gracias a la maduración neurológica progresiva del bebe más el acompañamiento de los padres introduciendo las rutinas.

Todo esto le permitirá al bebé ir aprendiendo las diferencias entre el día y la noche.

El recién nacido aun conserva el ritmo caótico del embarazo. Cada dos o tres horas se despierta comandado por la necesidad de alimentarse, el  bebé llora y uno le ofrece de comer.  Ira cambiando su reloj biológico en forma lenta.

Los menores de tres meses de edad todavía  no tienen bien establecidas las diferencias entre el día y la noche,

Es importante que durante el día el niño aprenda a dormir en distintas partes de la casa y con los ruidos habituales; por ejemplo, si hay que pasar la aspiradora se probará hacerlo y seguramente veremos que el bebé no se despierta. Lo mismo si se quiere escuchar música o tocar un instrumento, o si hay un hermanito jugando alrededor, etc. Lo ideal es que se desarrollen todas las tareas habituales del hogar, pero en forma natural y no dentro de un silencio absoluto.

Las rutinas ayudan a organizarse, a conocer lo que va a venir y, por ende, a sentirse seguros.

A determinada hora del día; es aconsejable ir bajando el ritmo. Se puede bañar al bebé, hacerle un masaje, darle de comer y acostarlo en su moisés con una luz tenue, ya en el lugar de la casa donde dormirá toda la noche.

Ya desde salidos de la panza de mama es bueno empezar con el  entrenamiento del recién nacido para llegar a dormirse solo, sin ayuda. Los papás serán los responsables de esta tarea.

A partir de ahora se buscará crear un ambiente silencioso y relajado donde el bebé pueda darse cuenta despacio de la diferencia entre las horas anteriores y las del sueño nocturno.

Alrededor de las 20-21 hs., el ritmo biológico del bebé comienza a registrar la noche y es en esos momentos cuando conviene ponerlo a dormir de modo rutinario. Si se acostumbra, lo más probable es que adopte, de aquí en más, siempre el mismo horario para ir a la cama.

En acción, durmiendo al bebe

Habitualmente, los recién nacidos se duermen comiendo. Los pediatras aconsejamos que esto no suceda. Es bueno que los bebés entren en un estado de ensoñación, pero que no se duerman del todo. Nuestro objetivo es, luego de darle de mamar y de unos mimos, acostar al bebé semidormido, medio borrachito y que él solo aprenda a dormirse. Le podemos cantar, pero trataremos de intervenir corporalmente lo menos posible, aun haciendo un esfuerzo para superar el deseo de tomarlo en brazos.

Si al niño le cuesta quedarse solo y al principio llora al dejarlo en la cuna, recurrimos a acunar el moisés, le damos al bebé palmaditas en la cola a un ritmo constante; todos los movimientos reiterativos son una buena solución para esta primera etapa. Si su llanto persiste, ¡a no impacientarse! Podemos alzarlo, tomarlo entre nuestros brazos, calmarlo, decirle que mamá y/o papá están ahí, que él debe dormir. Una vez tranquilo, intentamos nuevamente ponerlo en su cuna o moisés. Contar con la presencia cercana de mama y papa, escuchar sus  voces,  tenerlo en una actitud acogedora, le transmite al bebé confianza para relajarse y conciliar el sueño.

Durante la noche, si el niño se despierta para comer, es conveniente prender una luz tenue, alimentarlo y, si no es indispensable, no cambiarle los pañales.

Nunca olvidemos que a los bebe menores de tres meses les cuesta a veces conciliar rápidamente el sueño.

Los bebés muchas veces lloriquean dormidos o hacen otro tipo de ruidos que la madre interpreta como hambre. Esos lloriqueos pueden no ser de hambre. Habría que esperar a que el bebé llore con ganas antes de sacarlo de su sueño para comer porque, muchas veces, luego de algunos ruiditos, los niños continúan durmiendo.

A partir de los 2 meses y medio, generalmente el bebé hace pausas nocturnas de 4 horas, aunque a veces sus horarios no coincidan con los nuestros.

Encontrarás mas información sobre el tema, en el libro  “El picaro sueño” de la Dra. Marisa Gandsas

Consejos para enseñarle al bebé a dormir

Vestimenta cómoda para dormir

Diferencias de luz durante el día y la noche. Cuando duerma durante el día, mantener los estímulos luminosos. De noche, oscurecerle el ambiente, que duerma a oscuras y durante los despertares de las madrugadas, encender apenas una luz tenue.

Diferenciar el ambiente con ruido del ambiente sin ruido.

Establecer rutinas para los paseos, el baño etc.

¿Dónde duermen los recién nacidos?

En general el bebé, por algunos meses, suele dormir en un moisés o catre.

El moisés se lo puede ubicar en la habitación de los padres, lo que facilita la alimentación y la comunicación durante la noche.

 

Características del moisés

 

Seguridad del moisés

Revestirlo por dentro con un material acolchado, así evitaremos lesiones cuando el bebé se apoye en las paredes del moisés.

El colchón debe ser duro: cuando el niño esté acostado no presentará hundimiento en la parte central.

El pie del moisés debe ser estable, seguro, firme, de tal forma que impida su caída. Si es con rueditas, facilitará el traslado del mismo.

El moisés se puede usar hasta que el niño crezca lo suficiente y no tenga espacio; generalmente su uso se limita hasta el tercer o cuarto mes.

Posición para dormir: ¿boca arriba o boca abajo?

Hasta no hace mucho tiempo se sostenía insistentemente que los bebés debían dormir boca abajo, por el riesgo a ahogarse.

Ahora se aconseja que los bebes duerman boca arriba o de costado.

Almohada: ¿sí o no?

En cuanto a la almohada, no se recomienda su uso en niños menores de dos años. En los niños pequeños, puede ser peligrosa por el riesgo a sofocarse. La almohada es una costumbre cultural que los chicos, al ser más grandes, adoptarán con gusto por imitar a sus padres y entonces ya no ofrecerá peligros.

Encontrarás mas información sobre el tema, en el libro  “El picaro sueño” de la Dra. Marisa Gandsas

 

Plagiocefalia

La plagiocefalia posicional, también llamada “cabeza chata” puede ser consecuencia del dormir boca arriba o de costado. La plagiocefalia se manifiesta cuando la cabeza del bebé está siempre en la misma posición mientras el bebé duerme. Se debe recordar a los padres que la “cabeza chata” puede prevenirse.

A los bebés les agrada observar objetos cuando están despiertos. Por esta razón, giran su cabeza en dirección al objeto o la situación que les interesa. Para prevenir la plagiocefalia recomiendo:

Colocar al bebé boca arriba para dormir y cambiar alternativamente la posición de su cabeza cada día.

Colocar al bebé alternativamente en diferentes extremos de la cuna (un día en la cabecera, otro día a los pies de la misma). El bebé puede observar la habitación en cualquiera de las posiciones, pero su cabeza no estará siempre apoyada en el mismo lado.

También se puede colocar un móvil del lado de la cuna hacia el cual se desea que el bebé observe.

 

Finalmente, alrededor del quinto mes el niño empieza a rolar y durante el sueño, si bien se duerme boca arriba o de costado, es posible que lo encontremos boca abajo o en otra posición distinta. Eso no debe preocuparnos, ya que el bebé ha crecido y es capaz de moverse por sí solo.

Relajando al bebé

¿Cómo podemos hacer para que, ante una situación tensa (cólicos, sueño, mal humor), el niño encuentre ese estado de relajación?

Ante todo, le podemos ofrecer al bebé una posición cómoda. Podemos intentar sostenerlo boca abajo sobre nuestro antebrazo o alzarlo acurrucándolo, o ponerlo boca arriba sobre una superficie blanda.

Realizar movimientos rítmicos con él es una buena fórmula para que el niño vaya desconectándose del ambiente externo.

Aquí van algunos consejos

Camine con el bebé en brazos.

  • Pruebe mecerlo verticalmente; si quiere, de paso, realizar un ejercicio físico: póngase en cuclillas y de pie repetidamente, con el niño en brazos.
  • Siéntese a mecerlo en una hamaca o mecedora.

Otros recursos que no fallan son tocarlo, acariciar al bebé por todo el cuerpo. Los masajes corporales luego del baño calentito son infalibles. Se pueden realizar con aceite para bebé; les encanta y es muy placentero tanto para el niño como para la madre o el padre.

Los sonidos son un importante complemento a la hora de tranquilizar al bebé. Háblale mientras llora, cántale o tócale música. Ensayar un sonido monótono de cualquier aparato doméstico. Verán  que el niño prefiere ciertas combinaciones de sonidos.

Ante un bebé inquieto,  es bueno que los papás estén tranquilos. Sin duda alguna, ustedes y su bebé encontrarán la mejor forma de calmarse juntos.

Encontrarás mas información sobre el tema en el libro “El picaro sueño” de la Dra. Marisa Gandsas

 

Sueño y llanto del bebé

Es bueno saber que los recién nacidos lloran. ¡Sí, lloran! Y por muchos motivos. Los bebés no saben hablar y es la única forma de comunicación que tienen para decirnos que algo no lo satisface. Pero… ¿por qué dejarlos llorar? ¿Qué hacer frente al llanto?

La mayoría de las familias creen que los chicos lloran porque no comen lo suficiente o porque la leche materna  no es “buena”. Entonces cambian a la de  fórmula, pero a menudo, a pesar del cambio, el bebé continúa llorando. La dieta materna no es motivo de llanto de los bebés; no hay trabajos que demuestren que los bebés lloran por algún alimento determinado. Hay que decir que todas las leches maternas son buenas, de modo que si el niño come regularmente o el llanto aparece luego de una mamada, lo más probable es que no esté llorando de hambre.

También habrá que descartar que el niño no tenga frío o calor, que el pañal esté limpio o que no esté aburrido (esto parece increíble, pero los bebés se aburren; necesitan que les hablen, que los paseen, cambiar de ambiente etc.).

En muchas ocasiones los bebés no logran dormir sus siestas diurnas. Lloran, están fastidiosos. Los papás pueden interpretar que el niño tiene hambre. Le dan de comer pero él no tiene deseos de comer, lo que tiene es cansancio y dificultad para dormirse. Al no ser interpretado correctamente sigue llorando, traga aire, lo que le produce cólicos, ahora llora con más fuerza, está muy enojado, al sueño se le sumaron los cólicos, en fin se crea un circulo vicioso y no sabemos qué hacer.

Lo primero será cortar por algún lado este circuito. No es hambre, entonces probemos con alguna medida de relajación y luego intentaremos que se duerma. Si no lo conseguimos, al estar el bebé más tranquilo, podremos ofrecerle nuevamente el alimento. Seguramente, ahora  más relajado comerá mejor o podrá conciliar el sueno.

Encontrarás mas información sobre el tema en el libro “El picaro sueño” de la Dra. Marisa Gandsas

 

Sueño y cólico

El cólico provoca un llanto intermitente sin causa explicable. Ocurre generalmente durante los tres primeros meses de vida. La frecuencia puede aumentar de tal modo que llega un punto en que los padres se quejan de esta alteración.

Los niños que sufren de cólicos están bien alimentados, tranquilos y saludables entre una y otra crisis de llanto.

El cólico motiva que el niño llore y que simultáneamente produzca una flexión de sus piernas sobre el abdomen. Los cólicos son otra causa de dificultad en el dormir, sobre todo en los bebés menores de tres meses.

Los niños pequeños no saben eructar bien. A veces los bebés están molestos o nerviosos por otras causas, comen mal y se repite el circuito de tragar gas, etc. En suma, cualquier dificultad que aparezca en o durante la alimentación va a favorecer la aparición de los cólicos, debido al aire ingerido de más  y a su difícil evacuación.

Se pueden observar cólicos en bebés muy activos, donde el cólico es una expresión motora, como una descarga de energía.

Los cólicos suelen aparecer a la tardecita y prolongarse durante horas. A los tres meses el cólico va desapareciendo

¿Cómo ayudar al bebé que tiene cólicos?

Primero, observando la técnica de alimentación. Si toma pecho, que la prendida sea la correcta. Si toma mamadera, siempre hay que procurar que la leche salga gota a gota, no en chorro, y también que la tetina tenga tres agujeros para que el aire pueda salir; de esta manera el niño traga menos aire.

Después, ayudarlo a sacar el aire que tragó, es decir, que eructe cada vez que termine de tomar. Debemos espera unos cinco a diez minutos; si no eructó es porque tiene gases o los eliminó sin sonido.

Si el niño está ya con el cólico, lo que podemos hacer es acostarlo boca arriba, masajearle el abdomen, tomar ambas piernas y realizar movimientos de bicicleta. También podemos acostarlo sobre nuestro antebrazo y pasearlo boca abajo, siempre con la cabeza en un plano mas alta la cabeza que la cola así el aire asciende y se elimina.

Por ultimo, tener confianza, ¡que todos los cólicos pasan!

Encontrarás mas información sobre el tema en el libro “El picaro sueño” de la Dra. Marisa Gandsas